Adiós

Lo que necesitaba estuve siempre sentada viendo la piscina, conforme pasaron los días, me fui acercando a ella, cada día, un poco más cerca, así podríamos decir que en eso pasaron unos 365 días, imagínese, podría darme el lujo de decir que me encanta perder el tiempo, pues si, supongo que en resumen así es. un día me acerque tanto que casi me caigo al agua, me quede en el borde, siempre mirando, siempre esperando, esperando que? que viniera a mí, me engañaba con que el agua iba a estar caliente, cualquier tipo de excusa o consuelo para evitar el chapuzón ... un día de tantos, ya llegando a los 365 se me acerco un tigre me dijo que tenía que hacerlo, tenía que enfrentar mi miedo, no podía seguir esperando un milagro y pues me salió un impulso de no sé dónde y lo hice ... me tiré ... toque el fondo, mientras iba subiendo, recordé lo que era el agua fría, esa sensación no era nueva, cuando respire y afuera estaba el tigre, pude ver atrás los días perdidos, los días de engaño le llamo, donde quise creer que esa sensación iba a ser diferente, que iba a bailar en el agua, que sería libre como los peces, así no fue, no hubo nada en mí, más que un corazón desinflado, tiempo perdido y una realidad abofeteada, no era una piscina, es el mar, tan grande, tan turbio, tan lejos de mi.

 Vivir con el recuerdo de algo tan fuerte, puede ser muy toxico, todavía estoy intentando desintoxicarme de mis propios pensamientos. te llevare siempre en mi baúl de los recuerdos, como algo tremendamente hermoso, cuando te tocan el alma, no se olvida, no te olvidare, tan solo en mi realidad no vivirás mas y eso lo sentirás, cuando empieces a olvidarme, un día despiertes y ya no me sentirás a tu lado.

 Un beso mi amor de tabaco, esos besos, tan tuyos, tan únicos se quedaran en el recuerdo de hace 4 años, de ti simbólicamente me despido.